10 de marzo de 2011

UNA NOCHE CON SABRINA LOVE (2000)


Dirigido por Alejandro Agresti.

Hablar del cine argentino no es solo de mencionar grandes historias ni de aquel cine original, experimental ni creativo. También se hacen producciones de corte masivo, historias como las comedias románticas o algo que intente llevar a gente a las salas de cine, para así facturar buenas ganancias. No sé si referirme a esta película como una de aquellas que pertenece a este grupo, ya que tiene a Cecilia Roth como actriz protagonista (gran actriz x cierto), pero que tiene una historia ciertamente llamativa y que implica el interés de un público masivo. A mi me gustó.
Cuando Daniel conoce a Sabrina.
Daniel ha enviado una carta a un programa de TV nocturno, que sortea una noche de placer con la espectacular Sabrina Love (C. Roth). El adolescente vive en una provincia al interior de Argentina, y al enterarse que ha ganado dicho concurso, hace toda una travesía para poder llegar a la capital argentina y concretar tan esperada cita (o weno, cumplir la fantasía que cualquier adolescente quisiera concretar).
Sabrina tiene sus propios roches, x cierto, y al enterarse de lo complicado que le resultó el viajecito al muchacho, y la inocencia y candidez que el pibe desborda, decide engreirlo a más no poder, cumpliéndole con todo lo que el joven soñó (me imaginó que sabrán a que me refiero con TODO).

Daniel concretando su deseo.
Lo de Daniel es algo que a cualquiera chico entre los 14 y 16 años anhela. Pasar una noche con aquella chica de calendario, con aquella fantasía de la TV, con esa mujer que alborota nuestras hormonas cuando sale con poca ropa. Lo de Daniel también es algo que podría llamarse como "usual en chicos de provincia", que cuando llegan a la ciudad, sienten el cambio social al que han entrado. Muchas veces de manera brusca.
La escena cuando va a la jato de Sofía (la perfecta Julieta Cardinali) es el concepto claro en el cual gráfico lo que decía. Al momento de sacarse el sosten y mostrar sus pechos (algo normal para su personaje) origina un estupor tremendo en Daniel. No se lo esperaba tal vez, o quizá le excito el hecho de ver semejantes senos (jajajaja).
Daniel en la jato de Sofía. Escena inolvidable.


La película va mostrando también el lado bohemio de Buenos Aires, una ciudad que despierta en Daniel muchas sensaciones y entra al mundo que tal vez no pudo encontrar en su pueblo. 
Despierta el amor, la madurez, el sexo y la vida social, gracias al conocer de varios personajes con los que se topa en su camino por su fantasía anhelada: Sabrina Love.


Recomendable si es que quieres recordar fantasías de adolescente.




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