JERSEY GIRL (2004)

Dirigido por Kevin Smith

Kevin Smith ya tenía un significado recorrido en la dirección y había hecho unas películas que le valieron el título de "culto". Uno de los casos más resaltantes es el de "Clerks", comedia la cual  dirigió y que supuso un antes y un después para la comedia norteamericana. Y es que "Jersey Girls" era el salto hacía el cine "masivo" que no sé si Smith anhelaba, pero que al parecer al contar con Jennifer Lopez en el reparto, como que le dio algo de mala suerte. 

Oliver y su pequeña hija Gertie.

Y es que la historia que plantea es algo plana, pero que de hecho pega en  un público no acostumbrado a su humor tan ácido, que en anteriores películas regaló y que esta vez guardó, para ponernos una trama enclavada en el género de la "comedia romántica" que todos muy bien conocemos.

Oliver es un publicista (algo típico ver a publicistas en este tipo de pelas) quien lo tiene todo estable en cuanto a laboral, amor, economía y familia. Al conocer a Gertrude (JLo) se enamoran y se casan. Ella queda embarazada y luego de un jodido parto, ella fallece, dejando viudo a Oliver y con una bebita recién nacida. Aquí es donde comienza todo el declive para el joven publicista, ya que en un momento de sumo stress, explota en una conferencia... soltando cada verdad de manera impulsiva, que le cueste su puesto de trabajo y un mal precedente para su carrera profesional.

Una segunda oportunidad de amar, aparece
en la vida de Oliver.

A partir de ahí comienza la película. Y bueno.... es casi una de las tantas pelas sobre como un padre cría a su hija (o) y logran salir adelante pese a todo tipo de problemas.

Smith lo centra bien desde el punto de vista de él como viudo, pero creo que le quedó chico el papel de padre a Affleck. No lo noté tan cómodo con su interpretación y en ciertas escenas se le manifestó esa mala manera de "fingir" un papel.

Pero en cuanto a los hechos cómicos o situaciones por el estilo, nunca bajo la guardia la historia, y con la aparición de Maya (Liv Tyler), la película adquirió el toque romántico que le faltaba y que se suponía iba a aparecer en cualquier momento.

Oliver y la difícil decisión que debía elegir.

De ahí en adelante, Smith no sorprende. No pone ningún desvió en la historia que me quite el final y obvio desenlace que suponía iba a suceder. Y es que no quiso complicarse mucho y solo le puso pequeños obstáculos (o weno, la famosa enseñanza de toda comedia romántica) que fueron fácilmente esquivados para llegar a un epílogo normal y sin aspavientos.

Es una comedia-drama que no tuvo el éxito en taquilla que se esperaba, que originó el rompimiento en la relación entre Affleck y JLo; y que le valió la nominación a 3 premios Razzies de aquel año (premios a lo peor del cine en el año).

No es la gran película de Kevin Smith, pero no se le puede echar tierra al director ya que luego se reivindicó. Pero esa, es otra historia. 

Es muy probable que a muchos les agrade la historia, por lo ligera y convencional que es.

Puntaje: 4 puntos.