21 de junio de 2013

NEVER LET ME GO (2010)


Dirigida por Mark Romanek.

En una realidad distinta a la de ahora, la medicina tuvo grandes avances. Entre ellos estaba el hecho de usar clones humanos para salvar otras vidas humanas, por medio de trasplante de órganos. Es decir, se creaban seres solamente para que sirvan de donadores, con lo cual su existencia solo se fijaba en eso. Los crean y crían en lugares especiales, para que no se contaminen del ambiente, hasta que lleguen a cierta edad en donde sus órganos son aptos para la donación y así puedan salvar la vida de pacientes gravemente enfermos. Con ello, la medicina daba un gran salto en la búsqueda del cuidado y bienestar de la humanidad. Quizá sea algo agradable, en lo meramente médico, pero el hecho de crear "especímenes" humanos para extirparles sus órganos en cierto tiempo, suena medio inhumano.
Tres vidas destinadas a ser donantes
Esa es la historia de esta película, que nos muestra la vida de tres jóvenes a quienes seguimos desde su infancia y quienes se enredan en un triángulo amoroso. Dicho amorío está prohibido ya que los tres son seres creados por científicos y no pueden crear sentimiento alguno en su ser.
La realidad que se nos muestra, desde los ojos de estos tres chicos, es sumamente dura e inhumana. Vivir sin poder amar o soñar con un futuro, solamente estar pendiente de cuando estás listo para donar y hasta cuantos tipos donaciones podrás ser. 
La historia está basada en una novela escrita por Kazuo Ishiguro en el 2005, que nos muestra este otro mundo que vive a costas de una medicina que hizo el milagro de salvar la vida de varios pacientes, creando seres vivos que puedan ser "la reserva" de órganos que éstos necesiten cuando enferman.
Kathy y Tommy buscarán respuestas a su origen
Pero qué sucede si estos "experimentos" llegan a conocer sentimientos como el amor u otro tipo de afinidad? Qué sentir cuando sabes que tu vida solo está destinada para servir a otros mediante la donación?
Es duro el panorama que te muestra la trama, pero así es cuando el ser humano se insensibiliza y simplemente crea especímenes para salvarse así mismo.
Las actuaciones de los tres protagonistas es buena. Tanto Carey Mulligan, Keira Knightley y Andrew Garfield logran hacer buena química y mostrarnos lo que sucede cuando ellos rompen las reglas y conocen el amor.
El destino es cruel con algunos y a veces la humanidad pierde todo el concepto de, valga la redundancia, humanidad. Una realidad alterna que quizá a muchos dejará pensando que está bien o que está mal en la ciencia, en especial, en la ciencia médica.

Puntaje: 7 puntos

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