ACNÉ (2008)

Dirigido por Federico Veiroj.

La primera cinta de este director uruguayo trató sobre un problema casi común en la adolescencia: el acné.Pero más que relacionarlo con el hecho de que te salgan esos molestosos granitos en la cara, la palabra acné está muy relacionada con la adolescencia, llegando al punto de cada vez que es mencionada, irremediablemente se nos viene aquella etapa de nuestras vidas a la cabeza.

La historia como que también sigue ese mismo rumbo, ya que Rafa es un niño de 14 años (o bueno, adolescente) que sufre este problema facial a su vez que comienza a experimentar los cambios en su organismo y en su forma de ver las cosas.

Rafa mirando los granos que aparecen en su cara.

Pues Rafa es un chico normal. Va al colegio, juega pelota, tiene sus amigos y en sus tiempos libres estudia piano. Cuando la pubertad comienza a aparecer en su vida, lo hace mediante el acné, lo cual le jode la existencia terriblemente. La película aborda de manera especial el tema del despertar sexual, de la curiosidad, del afán por investigar sobre algo que se desconoce pero que guarda un misterioso placer en descubrir lo que es el sexo en sí. Para Rafa eso significa explorar la sexualidad, y si tiene que ir a un prostíbulo, no hay roche ni se siente intimidado.

Lo increíble de Rafa es que no es virgen. El muy pelotudo ya no es casto pero jamás en su vida besó a una chica, lo cual lo deja con esa interrogante en su cabeza: ¿qué se sentirá besar a una chica?

El acné es el simbolismo de la pubertad y de la timidez que el sufre.

Su despertar sexual con prostitutas.

Tendrá que combatir no solamente a este problema facial, sino que deberá afrontar el entrar a la adolescencia, combatiendo el temor que tiene de hablar (o jilear) con chicas. El temor se ve reflejado en la baja autoestima que siente al ver su cara llena de granitos y sentirse feo. Ese será el gran obstáculo que tendrá que pasar para poder vivir a plenitud su adolescencia.

Es una película que mezcla un poco el tema de la adolescencia con algo de humor negro. No le podría vincular algo de drama, porque la historia intenta escabullirse de cualquier tipo de etiqueta, reflejando en todo instante la influencia que tiene del cine independiente argentino y del latinoamericano en general.

"Acné" es el simbolismo de una edad, de sus temores, de sus interrogantes, de sus curiosidades y rarezas. No intenta enfocarse simplemente en un granito, sino que éste es el simbolismo de lo que todos conocimos como "pubertad".

Puntaje: 6 puntos.