1 de junio de 2011

EL JUEGO DEL AHORCADO (2008)


Dirigido por Manuel Gómez Pereira.

Película para pasar el rato. No me pareció ni buena ni mala. Es más, es hasta algo confusa por un instante, pero el final como que limpió cierto caos narrativo que tuve en unas escenas de la película. Es de esas cintas en donde en tan solo una acción, la vida de los personajes puede cambiar para siempre, ya sea para bien o para mal. A mi me llegó hasta cierto punto el trauma jodido que tuvo el chico, llamado David, ya que a lo largo de la historia se muestra violento y hostil ante soluciones que podrían arreglar sus problemas.
David lastimando a Sandra, a la salida de la escuela.
Sandra y David se conocen desde chibolos, y comienzan a guardarse secretos desde temprana edad. Van creciendo como confidentes, haciéndose grandes amigos. Una vez ya de grandes, comienza el gran rollo.
Ocurre un acto que desencadena un cambio total en la vida de ambos. Esto relacionado primero con Sandra y luego con David, quienes deciden guardar el secreto. 
Debido a este acontecimiento, nace una atracción especial entre estos dos grande amigos, quienes comienzan a vivir un amor que poco a poco será derrotado por el secreto que ambos guardan celosamente, y que acaba lentamente con la resistencia de David.
El tatuaje con su nombre (Sandra) que lleva David
en su hombro.
Vemos el amor adolescente en toda su plenitud. Aquel amor que es difícil maniobrar y sostener. Que puede ser vencido por cualquier tipo de problema chiquito, que no necesariamente es complicado. 
Los problemas que ocurren en la adolescencia, por lo general, intentan ser resueltos de manera singular, con aquel orgulloso afán de todo decifrarlo uno mismo sin consultar a algún mayor o necesitar de la ayuda de alguien.
La necedad de David implica que arrastre con ello la relación de amor que tiene con la guapísima Sandra.
Sandra con su amiga lesbiana, en una disco.
"El juego del ahorcado" es una película que ahonda en los miedos y los secretos. En aquellos muy bien guardados, que necesitan "salir" y que causan mucho dolor dentro de uno. Aquel dolor que se expresa en cambios alterados de la conducta de las personas, que destruyen relaciones (en todo sentido) y en donde el miedo y la locura comienzan a jugar un rol importante en la vida de los implicados. Solamente cuando el secreto deja de ser de uno solo, se siente el respiro y se sale de aquella prisión que a uno lo rodea. Aquella que lo hace sufrir y lo hace ser diferente de como era antes.


Es una película interesante para analizar. Un drama juvenil intenso, en donde el título tiene que ver con un juego que tanto David como Sandra realizan, para contarse ciertos secretos. Se ve como la conducta de cada uno, va decayendo mientras más avanza el tiempo, y el secreto va creciendo como un tumor.... que cuando siente que ya no tiene mucho espacio dentro de la cabeza de uno, comienza a causar serias heridas.


Buenas actuaciones, de ambos jóvenes, colaboran en armar una trama interesante, pero no genial.


No hay comentarios :