Q (2011)

Dirigido por Laurent Bouhnik.

Nuevamente el cine francés presenta una cinta provocativa, que puede disgustar al más conservador pero también, mostrarnos una vida que quizá no se puede tapar con un dedo. Nos muestra al amor de estos tiempos, en donde prácticamente es el sexo el protagonista principal y los sentimientos son los actores secundarios. No es una película en donde los desnudos son puestos por poner, mas bien se convierten en imágenes que plasman bien la idea que el director intenta transmitir, en una sociedad donde lo físico vale más y los deseos ocultos salen a la luz, cuando uno ve que no es pecado lo que anhela.

La bella y dubitativa Alice.

La forma como es narrada la película puede marear en algunos momentos, ya que los personajes se interrelacionan entre sí, en donde cada uno tiene un problema similar al otro en lo sexual (el amor se pone como una alternativa, como algo que no es tan necesario). 

Cecile es la chica que sirve de puente para unir varias historias. Ella es una chica que irradia deseo y provoca mucha lujuria. No sé muy bien que es lo que buscaba en toda la cinta, porque se le ve como una chica que le encanta resolver problemas sexuales y disfrutar de la provocación para sentirse importante. Como si sintiese que nole interesa a nadie, teniendo que llamar la atención de los hombres calentándolos, sin tener que llegar al acto sexual. 

Cecile y sus chicas, a vivir la vida.

Se nos muestra a la típica pareja de esposos que no puede tener relaciones por un problema en el pasado, a una pareja de jóvenes en donde se van distanciando debido al prejuicio de la chica ante el sexo y la propia historia de Cecile, que tiene novio pero éste no la desea. 

"Q" es una película con desnudos frontales, sexo explícito pero que no llega a ser abundante. No se siente una película que solo pende de las escenas de sexo, mas bien la sentí como una conjunto de imágenes que buscaban transmitir algo que en Europa se está viendo ahora último... el sexo supera al amor.

Es una quemadez total la cinta, ya que no muestra una coherencia total entre sus historias, pese a que todas apuntan a lo mismo. A veces se siente como extraño que todos los personajes estén conectados por alguien...

En fin, en el cine francés se pueden hacer esta clase de películas y todo bien.

Puntaje: 5.5 puntos.