DREI (2010)

Dirigida por Tom Tykwer. 

Los romances de tres parecen muy comunes en Europa, porque ya son varias las veces que me topo con este tipo de cintas. En esta ocasión la perspectiva es diferente a comparación de películas como "Castillos de cartón", "Splendor" o "After", en donde las relaciones son conscientes de lo que hacen y el sexo casi es el principal protagonista de la trama. Para esta historia surge una trama bien interesante que desenvuelve sus lazos a través de la crisis de una pareja y la aparición de un tercero que activará sus lados más oscuros.

Hanna y Simon compartirán el mismo amante

Hanna y Simon es una pareja que pasa por un momento crítico tras 20 años juntos. Simon tiene un problema médico que le esconde a su esposa, quien a raíz de que éste se ha alejado de ella, descubrirá en Adam (un hombre al que conoce en el teatro), la pasión que ha ido perdiendo en su matrimonio.

Es así como la pareja se va alejando de a pocos. La enfermedad de Simon ayuda mucho a ésto, generando en él un cambio en su identidad cuando conoce a un tipo en la piscina, quien le despertará su lado homosexual que no creía tener. El hombre en mención es nada menos que Adam (sí, el que se acuesta con su mujer), quien también tiene relaciones con hombres.

Simon descubrirá una pasión oculta

Así es como va corriendo la historia y vamos viendo como la pareja hace frente a ésto: el ocultar un amante en común.

Lo bueno es que no es tan compleja y tampoco tan explícita como para espantar a públicos muy puritanos. Es un extraño tipo de relación de parejas (los tríos), en donde cada uno sabe sus límites y reconoce que lo que están haciendo les agrada y lo conllevan bien. En "Drei" podemos ver justamente eso, del como la pareja afrontará este tipo de relación "entre amantes" y el camino que deberán seguir. No se trata de chiquillos rebeldes que solo buscan sexo y nada más. Acá el tema pasa por otra perspectiva: un matrimonio que se siente feliz con un integrante más en la relación.

Es difícil de aceptar la idea pero como dije al inicio, pareciera que en Europa este tipo de relaciones son normales.

Puntaje: 6.5 puntos