24 de marzo de 2012

TOMBOY (2011)


Dirigida por Céline Sciamma.

Si no lo sabías, amo al cine francés. Debe ser por la forma como se narran las historias de sus películas o por los temas tan abiertos que siempre tocan. Esta vez me interesó un trailer y quise ver la película que a continuación he subido. Es obvio que es de ese tipo de películas que no llegarán al circuito comercial limeño, pero que no por eso se le deba ser indiferente, porque felizmente existen lugares en el mundo en donde se tocan temas que son la realidad del día a día del mundo de hoy. Sin prejuicios ni conservadurismo tonto ni un veto que impida observar algo que podría ocurrir en el seno de una familia cualquiera.
"Tomboy" es tierna a pesar de que no irradie ternura en sus imágenes. La ternura que uno pueda sentir en la historia es por la empatia o comprensión que uno pueda sentir con su pequeña protagonista. Aquel miedo de expresarse y ser juzgado, o que simplemente se sienta incómodo y triste porque su mente y cuerpo no se llevan de la mano. La ternura se siente por el simple hecho de que la protagonista es una niña, y verla tan encerrada provoca algo de tristeza.
Jeanne(la hermanita)  cortándole el cabello a Lauren.
"Tomboy" nunca pone un antes y un después. Te pone la historia en el tapete sin explicaciones de por medio. Trata sobre una niña, Lauren, que se ha mudado con su hermanita y sus padres a un nuevo barrio. El aspecto físico de Lauren dista mucho de lo que uno cree como apariencia de una niña de 10 años, puesto que se viste como niño y tiene ciertos rasgos físicos de un varoncito. Esto no es problema para los padres, quienes al parecer no notan nada raro en ella. 
Lauren conoce a su nuevo barrio, teniendo que aparentar ser un niño para poder entrar en el grupito de barrio que existe en el lugar, en donde todos son niños. Lisa, una niña del lugar, es la que conoce primero a Lauren (quien se hace llamar "Michael"), a la cual lleva al grupo y con quien entabla una amistad que pasa por jugar pelota, vacilarse y hacer cosas de niños.
Lauren se hará llamar Michael, al lado de Lisa.
Uno tarda mucho en darse cuenta que Lauren es niña (si no fuera por el desnudo entero que hace, no lo hubiera ni imaginado).
Mientras más miente Lauren sobre su identidad sexual, se va creando nuevos problemas y muchas confusiones que arrastran a otras personas. Ella se siente cómoda en el papel que ha creado. En esa identidad paralela que ha hecho creer en su nuevo barrio, lo cual le permite desenvolverse como siempre quiso y con lo cual es feliz. Esa felicidad se ve opacada cada vez que se mira a un espejo y se da cuenta que es en realidad una niña, mostrándose como encerrada en una prisión (su cuerpo), del cual no puede hacer nada para intentar que no sea así.
Una película que intenta dejar un mensaje a los padres sobre los descuidos que éstos a veces cometen, no enterándose que los niños a muy temprana edad se van forjando una personalidad y una identidad, y sí no se está detrás de ellos...... ocasionará que sufran.
Con esto no quiero decir que esté mal la actitud de Lauren. La película me hace pensar que quizá las maneras más correctas para afrontar una situación como ésta es apoyar al niño(a) y estar con él en todo instante, apoyando el camino que decida tomar. Lo peor que se le puede hacer es ponerle trabas o alejándolo del rumbo que quiere seguir.

"Tomboy" es una historia que podría sucederle a cualquier familia.

Puntaje: 7 puntos.

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